Eduardo Vera comparte con Mantras Urbanos este artículo en el que introduce algunos conceptos de la Nueva Medicina Germánica, poco conocida en nuestro país. Vera explica algunos de sus aspectos básicos a través del ejemplo concreto de una enfermedad: el cáncer de mama. Veamos de qué se trata la llamada Medicina del Dr. Hamer que no es ni una terapia ni una medicina alternativa. Sus defensores la proclaman como una nueva ciencia, un nuevo paradigma, como la primera medicina científica de nuestra historia.
* Por Eduardo Vera
Cuando escuchamos o mencionamos la palabra “cáncer” inmediatamente se nos viene a la mente la idea de una enfermedad incurable. Si tuvimos a un familiar que falleció por esa causa un miedo asolapado nos toca el corazón, como si de una lotería del mal se tratara. Solo en el Perú los casos de cáncer de mama detectados anualmente superan los 20,000 y el número de muertes en el planeta bordea las 500,000 personas al año, en su mayoría mujeres.
Los que conocemos las Cinco Leyes Biológicas de la Nueva Medicina Germánica -término con el que se conoce al gran descubrimiento científico del Dr. Ryke Geerd Hamer, Doctor en Medicina y Teólogo alemán con estudios de Física- no sentimos en absoluto miedo alguno. Nosotros entendemos que la etiqueta atribuida a esta supuesta “enfermedad” se debe a un error producto de la falta de conocimiento de estas cinco leyes naturales. Para graficar esta idea es como si en el S. XV un médico oficial -seguramente de la Iglesia Católica- nos dijera que para curarnos una enfermedad estomacal tenemos que rezar. En aquella época se ignoraba cómo funcionaba el sistema digestivo y la ignorancia proponía métodos y curas descabelladas en la mayoría de los casos.
El cáncer de mama, como los otros tipos de cáncer, así como las enfermedades autoinmunes, las parálisis, la pérdida de los sentidos, el retraso mental y los diferentes desórdenes del estado de ánimo -enfermedades mentales- son en realidad procesos biológicos y no “fallas” de la naturaleza. Con el conocimiento de las Cinco Leyes Biológicas de la Medicina Germánica podemos demostrar –porque es científico- porqué aparece una enfermedad. Asimismo sabemos cómo será su evolución, qué tipo de riesgos podría acarrear (porque en un porcentaje mínimo, 5%, estos programas biológicos, etiquetados ahora como “enfermedades” pueden originar la muerte del ser) y cuáles serían los cuidados a tomar en cuenta para que estos procesos en general llegaran a buen término.
Antes de que el Dr. Hamer propusiera estas leyes ningún científico, por lo menos que se conozca, había relacionado los diferentes procesos evolutivos –que pueden durar millones de años- con lo que ahora llamamos “enfermedad”. Para demostrar esta relación solo es necesario el sentido común y entender que los órganos y el cerebro son una sola cosa, ya que es posible verificar con una prueba radiológica cerebral cómo una enfermedad visible en el organismo –llámese un cáncer de mama- está impactando un área cerebral específica. El Dr. Hamer estudió más de 60 000 casos y elaboró un Mapa Cerebral de la conexión de áreas cerebrales específicas con los diferentes órganos.
¿Qué origina las enfermedades?
Lo que llamamos “enfermedad” es creado por un Conflicto Biológico. Esto no es nuevo ya que en Oriente se sabe esto hace miles de años, aunque los orientales no tenían un sistema científico capaz de demostrar cómo un conflicto –es decir una situación crítica o estresante que nos afecta en determinado momento- originaba la “enfermedad”.
El Dr. Hamer no solo descubrió que efectivamente, y como ya sabían los orientales, son las situaciones o problemas existenciales los que originan las enfermedades, sino que además afirmaba que no había nada de malo con la manifestación de los síntomas –que conocemos como “enfermedad”- pues son parte de un proceso adaptativo por el que pasa el cuerpo como efecto de esos desafíos que se le plantean.
Pongamos un ejemplo: Una mujer camina con su hijo de la mano y por descuido este se escapa, cruza la calle y el pequeño es atropellado por un auto. El niño sobrevive y es hospitalizado. En este caso la Reacción Biológica ante esta situación –algo que está más allá del nivel de comprensión de nuestra actual civilización- es producir más leche pues al alimentarse mejor el niño tendrá más probabilidades de recuperarse. ¿Qué ocurre con la mama de una mujer durante una situación conflictiva como esta? Si no estuviera dando de lactar se producirá un aumento en el tamaño de los lobulillos mamarios. Una vez resuelta la situación y al ver que su hijo está recuperado y haciendo su vida normal, la madre sentirá alivio pues se habrá resuelto el Conflicto. En ese momento sentirá algún tipo de molestia en la mama pues se habrá formado un nódulo –completamente inocuo para la madre ya que esta formación “tumoral” o bien se degrada o bien se encapsula- que la medicina convencional, occidental, alopática, llama tumor o Adenocarcinoma Mamario. Si esta mujer va a un médico a chequearse y este le dice que tiene un tumor canceroso lo más probable es que esta desarrolle otro tipo de conflictos: autodevaluación (baja su autoestima y puede originarse cáncer de huesos); pánico a la muerte (que puede originar tumores pulmonares); miedo a morir de hambre (por ella y/o sus hijos lo que genera aparición de tumores en el hígado) y para finalizar en una prueba radiológica cerebral se puede notar la aparición de tumores cerebrales ubicados en las zonas del cerebro correspondientes a la ubicación de los órganos afectados.
Para la medicina occidental las células cancerígenas son diseminadas a través de la sangre y la linfa por todo el organismo, lo que se conoce como Metástasis. Pero lo que no sabe la mayoría de personas es que esta es una teoría del siglo XIX de Virchow, que no ha sido comprobada.
Puede haber varios conflictos o también varios Impactos Biológicos surgidos por un solo conflicto. Ambas posibilidades son científicas y comprobables para la Nueva Medicina Germánica. Si la medicina occidental entendiera que estos cambios orgánicos –deformaciones, aparición de tumores, úlceras, etc- no tienen nada de malignos y que obedecen a procesos naturales producto de algún tipo de conflicto, todas las terapias y protocolos médicos tendrían que ser reformulados por el bien de los pacientes.
Otro factor importante a ser observado son los tratamientos para esta “enfermedad”. La quimioterapia es el peor error en medicina que en los siguientes 100 años la civilización se encargará de juzgar. Los típicos elementos usados en este tratamiento son los Agentes Alquilantes –los más comunes son los derivados del Gas Mostaza que tienen un altísimo nivel de toxicidad- un bombardeo tóxico que termina matando al paciente, cuando este incluso sin conocer la Nueva Medicina Germática se hubiera podido salvar.
En la Nueva Medicina Germánica existen diversas terapias para apoyar la sanación del paciente pero lo más importante para esta medicina es la prevención, lo que para nosotros quiere decir aprender sobre la Nueva Medicina tempranamente.
Estoy convencido de que esta medicina es un sistema absolutamente científico capaz de avalar lo que en algún momento los pacientes intuyen que ocurre pues se preguntan: “¿No será que me enfermé por este Gran problema que tuve?”.
* Eduardo Vera es coaching en Medicina Germánica y uno de los más conocidos difusores de esta propuesta médica en nuestro país. Teléf.: 953735630. En Facebook: https://www.facebook.com/hamernmg/ https://www.facebook.com/
Más información:
Página web de la Nueva Medicina Germánica en Perú: http://nuevamedicinagermanica.org/
http://www.materialdenmg.com/entrevista-al-dr-hamer.html
https://www.newmedicine.ca/spanish_breast.php
Algunos libros sobre la Nueva Medicina Germánica:
“La Nueva Medicina, Presentación”, de Ryke Geerd Hamer;
“La génesis del cáncer”, de Ryke Geerd Hamer;
“Cáncer de mama ¿El cáncer más frecuente en las mujeres?”, de Ryke Geerd Hamer;
“Me he tratado con la Nueva Medicina del Dr. Hamer”, de Pierre Pellizzari;
“Facilitar la Salud”, de Vicente Herrera Adell.
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